lunes, 3 de marzo de 2014

Carta de un eurorealista a Iñigo Méndez de Vigo.



Estimado Don Iñigo,  he leído con especial asombro  sus palabras  hace un día en una conferencia, diciendo que en España "no hay ni eurófobos ni euroescépticos" y que "este país demostrará en las próximas elecciones europeas que quiere construir, no destruir",   bueno, eurófobia no sé, no creo que nadie odie a si mismo, porque eurófobia es eso, odiar a Europa y lo europeo, y no creo que un europeo se odie a si mismo, al igual que un asiático no odia a lo asiático o a Asia, pero volvamos al tema,  permitame  discrepar con usted, para empezar, en España viven  47 millones de personas,  haría bien usted en no  hablar en nombre de todas ellas como si las conociera una a una,  entiendo que como secretario de estado para la UE  tiene que dar usted una imagen de país europeista, pero no hable en nombre de todos,  le vendría  bien mirar las encuestas sobre lo que opinan los españoles  sobre la unión europea,  más del 72% desconfían de las instituciones europeas, cada vez menos gente apoya  seguir en el Euro, solo el 49% cree que ha sido beneficioso para España pertenecer a la UE,  esto no es solo "una cierta desafección hacia la UE porque no hace lo suficiente" como dice usted, sino un claro  euroescépticismo creciente,  le indico una encuesta del año pasado,  más del 56% de los españoles declara sentirse solo español o  más español que europeo, y un 30% que se siente tan español como europeo  en otras palabras,  la propaganda del establishment de Bruselas para hacer cuajar  una especie de sentimiento  identitario europeo ha cuajado poco  en España,  por mucho que  ciertos  fanáticos de la UE  lo persigan, la gente no va a cambiar  sus banderas nacionales por la de la UE,  dijo usted también que  los españoles "quieren más europa y más deprisa", bueno,  la mayoría de españoles, precisamente un 75%, rechaza  ceder más soberanía a la UE y que prefieren que cada país miembro determine sus políticas, ya le digo, parece que  "el europeismo español"  empieza a resultar cada vez más mito que realidad,  otra cosa es que  nuestra corrompida casta política y empresarial en general (excepto ciertas  excepciones) quieran a la UE, no me extraña,  en España los políticos y grandes empresarios ya demostraron más de una vez que son capaces de vender su país por sus intereses, aún recordamos  las campañas  electorales de Felipe González financiadas por las élites alemanas,  puede que en España al igual que en otros países europeos los movimientos euroescépticos  sean aún pequeños, en parte porque debates como el separatismo catalán eclipsa a otros debates además de la creencia de muchos españoles de que la UE solo tiene ventajas y nada de desventajas,  pero recuerde,  en el Reino unido hace tan solo 10 años  solo 19% de la población quería abandonar la UE, hoy son el 60%, y partidos euroescépticos que antes eran  residuales hoy tienen representación parlamentaria amplia,  el problema de la UE es que  esta yendo contra la historia de Europa,  Europa se construyó mediante la diversidad de sus paises, y todo intento de su unificación fracasó porque la población siempre quiso mantener la diversidad que enriqueció y enriquece a Europa, la UE quiere hacer lo imposible, mezclar el agua con aceite, por eso no tiene futuro.

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